Borges y Shakespeare:
el disfrute de
la “música verbal”
2016 es un
año en el
que coinciden importantes
aniversarios relacionados
con el mundo
de la literatura.
A pesar de
que no hay
gran precisión y
certeza con
respecto a
las fechas exactas,
sí es cierto
que entre fines
de abril y
principios de
mayo de 1616
en Stratford-upon-Avon moría
el dramaturgo, poeta
y actor inglés
William Shakespeare,
el escritor más
importante en
lengua inglesa y,
en Madrid, moría
Miguel de Cervantes
Saavedra, novelista,
poeta y dramaturgo
español considerado
la máxima figura
de la literatura
española. Debido
a esta coincidencia, quizás
un poco forzada
en cuanto a
fechas se refiere,
el calendario escolar
celebra cada
23 de abril
el Día del
Idioma en memoria
de estos dos
grandes exponentes
de la literatura
universal.
Conmemoramos el Día
del Idioma recordando
a dos autores
europeos pero,
paradójicamente, quien
sí se cree
que murió exactamente el
23 de abril
de 1616 fue
el Inca Garcilaso
de la Vega,
conocido como
el “padre de
la literatura americana”
y “el príncipe
de los escritores
del Nuevo Mundo”.
Nacido en Cuzco,
hijo del conquistador
español Sebastián
Garcilaso de
la Vega y
de la princesa
Inca Palla Chimpu
Ocllo, asumió su
condición de
mestizo y
supo conjugar las
dos culturas a
las que pertenecía
en su obra.
También este año se cumplen cien años
del fallecimiento del poeta, periodista y diplomático nicaragüense Rubén Darío, representante máximo del
modernismo iberoamericano, y del escritor norteamericano Jack London creador de
“Colmillo blanco” y “La llamada de lo salvaje”.
El pasado 21 de abril se celebró en
Inglaterra el centenario del nacimiento de la novelista y poetisa Charlotte Brönte, autora de la muy
exitosa “Jane Eyre”.
Un gran escritor argentino también es
protagonista de este “año literario” tan particular. El pasado 14 de junio se
cumplieron treinta años del fallecimiento de Jorge Luis Borges.
Había nacido en la ciudad de Buenos
Aires el 24 de agosto de 1899 y fue candidato “eterno” a un Premio Nobel de
Literatura que le fue esquivo y nunca ganó, quizás por su postura y opiniones
políticas.
Se lo recuerda y homenajea con
diferentes eventos alrededor del mundo entero: conferencias; programas de radio
y televisión; entrevistas a sus biógrafos, críticos literarios y expertos en su
obra; documentales; recitales; muestras de creadores de las diferentes
disciplinas del arte inspiradas en sus textos; nuevos libros sobre su vida, su
obra, su pensamiento, muestras de fotografía y hasta tiras de historieta …
La escuela también es un lugar perfecto
para homenajearlo, y la mejor manera de hacerlo es difundiendo, estudiando y
disfrutando de su obra. Es tan vasta, rica, cosmopolita, variada que permite
ser abordada desde múltiples perspectivas: la ciencia, la plástica, la música,
la historia, la geografía, la tradición, la lingüística, la psicología, la
crítica literaria, la mitología, la estética, la religión, la política...
En el aula de Lenguas Extranjeras
podemos trabajar tomando como texto base “El libro de los seres imaginarios”
publicado en 1957, en su versión en Inglés. A actividades de comprensión
lectora se pueden sumar actividades de producción muy creativas explorando las
áreas de experiencia propuestas por el Diseño Curricular de Lenguas Extranjeras
y poniendo en juego todos los elementos de la lengua de que dispone el alumno
para expresarse.
Este libro fantástico también permite
la elaboración de proyectos interdisciplinarios relacionados con la Plástica,
las Ciencias Sociales y Naturales, etc.
Desde las magistrales páginas de Jorge
Luis Borges también podemos arribar a las de William Shakespeare tomando su
maravillosa “conexión” con el célebre autor inglés y trabajar conjuntamente
con el área de Prácticas del Lenguaje en 7mo. Grado o en Nivel Medio.
“Shakespeare es mi destino” declara
Borges en “La memoria de Shakespeare”, relato publicado en 1983.
El área de Prácticas del Lenguaje
dispone de todo su material para acercar al alumno a la palabra de Borges y
trabajar, a través de él, diversos contenidos fácilmente relacionables con
otras áreas e, incluso, con el mundo global de la literatura.
“Shakespeare y las unidades”, texto
escrito a propósito del cuarto centenario del nacimiento de Shakespeare, abre
un espectro inmenso para el análisis de distintos autores relevantes de la
literatura universal y de las obras de William Shakespeare en particular: un
proyecto enfocado directamente a las prácticas del lenguaje, el análisis y recursos literarios.
En “El destino de Shakespeare”, Borges
sostiene que no conocemos realmente al gran escritor inglés sino a través de
sus personajes y que su “gloria póstuma” hubiera sido, seguramente, una gran
sorpresa para él. El texto finaliza con un fragmento brillante: “La historia
agrega que, antes o después de morir, se supo frente a Dios y le dijo: Yo, que
tantos hombres he sido en vano, quiero ser uno y yo. La voz de Dios le contestó
desde un torbellino: Yo tampoco soy; yo soñé el mundo como tú soñaste tu obra,
mi Shakespeare, y entre las formas de mi sueño estás tú, que como yo eres
muchos y nadie.””
Este mismo fragmento cierra “Everything
and Nothing”, un delicioso texto de 1960 dedicado al Shakespeare actor y
dramaturgo que podría funcionar como inspiración y puntapié inicial de un
proyecto escolar vinculando a estos dos geniales autores con el teatro. Borges
también se refirió a las obras de teatro de Shakespeare en el apartado “El
Teatro” de “Introducción a la Literatura Inglesa”, un texto que escribió en
1965 en el que describe y analiza varias de sus obras. En él dice del autor
inglés : “El destino de WILLIAM SHAKESPEARE (1564-1616) ha sido juzgado
misterioso por quienes lo miran fuera de su época. En realidad, no hay tal
misterio; su tiempo no le tributó el idolátrico homenaje que le tributa el
nuestro, por la simple razón de que era autor de teatro y el teatro, entonces,
era un género subalterno.”
Esta “Introducción a la Literatura
Inglesa” es digna de llevar a las aulas por su riqueza de contenido, la
cronología histórica, el análisis claro y simple y las relaciones que establece
entre diferentes autores y entre personajes de obras diversas.
Leer las palabras de Borges sobre
Shakespeare en tantos escritos revela
una extraña y casi íntima comprensión de su obra y hasta de su ser, no
oculta la profunda admiración que
profesa por quien dice que hacía “música verbal”. Le dedica numerosos
ensayos, una antología de su obra, prólogos, prosas e, incluso, poesía:
“Macbeth
Nuestros actos prosiguen su camino,
que no conoce término.
Maté a mi rey para que Shakespeare
urdiera su tragedia.”
La obra de Borges resulta inmensamente
inspiradora y enriquecedora para todo el que se anime a descubrirla y el
trabajo docente de difundirla en el aula es, además de un hecho educativo y
cultural, una tarea absolutamente gratificante.
Silvina
Iacovino
Bibliografía de consulta:
Borges,
J.L. “El Hacedor”.
1960
Borges,
J.L. y Vázquez,
M. E. “Introducción
a la Literatura
Inglesa”.
1965
Borges,
J.L.: “Shakespeare y
las unidades” en
“Cuadernos hispanoamericanos”. 1964
Borges,
J.L. : “El
destino de
Shakespeare”.
1980
Borges, J.L.: “La memoria de Shakespeare”.1983
Buenos Aires Herald. 6 de agosto de 2006
Diseño Curricular de Lenguas Extranjeras. CABA.
Martínez,
Cecilia. Diario
La Nación. 25
de febrero de
2026. “Año de
grandes efemérides:
vanguardistas, clásicos,
románticos … y
Borges.”
Periódico Los Andes. 14 de junio de 2016.“Argentina rinde
culto a Jorge Luis Borges en el CCK a 30 años de su muerte”